Los abuelos


“Los abuelos son la conexión generacional con nuestros antepasados, son una bendición de vida, son como el oráculo de la sabiduría y una expresión pura del amor incondicional”

Todos en algún momento de nuestras vidas volvemos a esos recuerdos, los mas agradables que tenemos en la mente, volvemos a nuestros abuelos, y podemos recordar su olor, su voz o la manera que tenían de protegernos, los abuelos son esa figura de amor que nos acompaña durante nuestra vida, cuando estos han fallecido se convierten en un recuerdo hermoso, se convierten en ese lugar seguro al cual volver. Yo aún recuerdo el aroma del abuelo, han pasado muchos años desde que el falleció y aun recuerdo el aroma de sus sacos y sus camisas y también recuerdo que cuando me ponía a llorar cantaba una canción ranchera fue por eso que me gustaba tanto la canción que se llamaba Malagueña salerosa, la letra decía algo como “Que bonitos ojos tienes, debajo de esas dos cejas.”

El abuelo me la cantaba cuando yo estaba llorando por algo, también recuerdo claramente como el abuelo me hacía mi ropa a maquina y a medida. Mi abuelo era un sastre y le gustaba confeccionarme la ropa el mismo, me hacia pantalones de lana y tenía que usarlos en pleno verano y la lana pica y pica mucho, pero los usaba orgullosa porque los había hecho mi abuelo, mi abuelo tenía hazañas para contar y también muy buenas historias, me contaba sobre su vida, sobre el país, sobre los gobiernos, sobre su madre, sobre la vez que vio un ovni aterrizar en la plaza de Cajamarca, siempre me quede en duda sobre esa historia, pero siempre escuchaba sus historias y volaba, tal vez fue allí o mucho antes que empezó ese gen de escritora. Los abuelos están llenos de proverbios y frases, los abuelos son mejores padres que los padres, porque los abuelos nos comprenden y nos aman mucho más y desde su experiencia de vida, los abuelos jamás te juzgan o intentan interferir en tus decisiones, ellos solo te escuchan y te apoyan, recuerdo una vez a mis dieciséis años cuando tenía ganas de estudiar fotografía, en esa época nadie de mi familia quiso apoyar mi idea loca, entonces el abuelo se acercó a mi con cautela, y escondido me dio doscientos soles (moneda peruana), me dijo :”Inscríbete en una buena academia y estudia eso que quieres”, yo lo miré a los ojos y me puse nerviosa, luego me dijo “Escóndelo” como si estuviera dándome algo ilícito, no pude inscribirme en ninguna academia de fotografía, porque yo vivía en un pueblo pequeño y las clases de fotografía las daban en la capital de mi país, pero con esos doscientos soles me compré mi primera cámara fotográfica de carrete, así que nunca jamás olvidaré ese gesto, podría contar tantas, muchas cosas mas sobre el abuelo, pero me las guardare en el corazón, como las veces que compraba bizcochos y los traía a la casa, el sabía que yo amaba los bizcochos así que me dejaba comerme hasta diez en un día o las veces que me llevaba de paseo a comer helado o las otras tantas que me aconsejó a su manera, el abuelo tuvo un lugar muy especial en mi corazón, su muerte de hecho me provocó tal dolor en el corazón que inspiró el libro “El retorno” ,tal vez en el fondo quería que el abuelo retorne.

Los abuelos en nuestras vidas son la expresión de la sabiduría magnificada, poseen la experiencia de haber criado a nuestros padres y son de hecho mucho más sabios que ellos, los abuelos siempre van a querer nuestro bienestar, yo nunca, recuerdo haber visto a mi abuelo molesto conmigo e incluso hasta el final de sus días cuando vi el espíritu irse de sus ojos en el lecho de muerte, incluso hasta ese momento me amó profundamente. El amor de los abuelos es el amor mas incondicional que pueda existir, es ese amor que te enseña, que te permite aprender, que te trae las enseñanzas de generaciones pasadas y que se mezcla con el presente para lograr algo sorprendente, un abuelo es una bendición de vida porque es como el oráculo de la sabiduría, siempre puedes ir y tener una conversación a escondidas y los abuelos siempre saben lo que te gusta porque te observan, recuerdo que mi abuelo sabía que me gustaban las tunas y siempre que salía a la calle me traía muchas tunas para comer ¿Cómo lo supo? Nunca se lo dije, el me veía, el observaba mi comportamiento, los abuelos son silenciosos y sigilosos y al estar ancianos ven las cosas desdelos ojos de esa sabiduría ancestral con sigilo y sin intervenir, solo observan y aconsejan en el momento correcto.

Mi abuelo murió hace muchos años aun tengo un retrato de el en mi habitación, no he ido a su tumba, sé que él no está más allí, pero siempre pienso en el y la generosidad que aprendí de él. Si aún tienes a tus abuelos con vida o a uno de ellos, valóralo, porque tienes entre manos un enorme tesoro de amor y sabiduría ancestral, son los abuelos esa conexión necesaria con el pasado y sus enseñanzas que nos hacen mas humanos, amorosos y nos permiten trascender en el conocimiento que se transmite de generación a generación.

“Voy a deciros un secreto somos prisioneros del tiempo”
“Apóyate en mi brazo abuelo”

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