Un día te levantas y haces una
lista mental de tus actividades y resulta que en el camino te das cuenta que tendrás
que hacer un pequeño ajuste para poder obtener los resultados deseados, en ese
punto te das cuenta te enfocas más en el resultado que el proceso mismo y de
pronto estas absurda y completamente estresado con cientos de cosas en la
agenda por hacer; eso ocurre porque buscas tener el control de una situación y
lo mismo suele también ocurrir con las
personas cuando de pronto encuentras una persona que te enerva porque no se comporta como tu desearías,
eso ocurre porque las personas tienen un concepción predeterminada de cómo debería
ocurrir un determinado evento e incluso llegando a los extremos algunas
personas tienen una concepción de cómo debería comportarse otro ser humano y
cuando se encuentran con seres humanos que no cumplen con sus concepción buscan
hacer un cambio en su conducta a traves del control .
El deseo de tener el control
sobre una situación no es malo porque te permite generar una planificación y en
definitiva te permite alcanzar objetivos, porque nos permite pensar en un
conjunto de pasos para poder por ejemplo escribir un libro o conformar una empresa,
el control de por si no es malo pero si te dejas dominar por el deseo de
control dejas de prestar importancia a lo realmente relevante que es el
disfrute mismo en la obtención de los objetivos.
Muchas veces las personas desperdician
energía y emociones en el deseo de ejercer control, un control exacerbado y
brutal y la única medicina para lo que yo denominare” el mal del control” es
aprender a soltar el control mismo , eso por supuesto no significa que cederás
el control de tu vida, mundo y decisiones al azar sino que por el contrario ejercerás
un balance en el modo de reaccionar al mundo y personas, cuando eres capaz de
identificar ese aspecto tienes mayor oportunidad de ejercer un disfrute real ,
supongamos que quieres realizar una caminata al aire libre y te gustaría que
sea un día soleado pero de pronto te cae encima un aguacero, pues entonces hay
dos opciones o disfrutas de la lluvia espontanea o te lamentas por no tener un día
soleado, lo mismo ocurre con las personas si una persona tiene un determinado
comportamiento o te frustras por su comportamiento o aceptas y disfrutas los
matices de esa persona.
Debemos entender que el deseo exacerbado
de control nos limita de una amplia gama de posibilidades que hacen que las
experiencias se tornen incluso mas gratificantes de lo esperado.
Este artículo es un llamado al
disfrute de la vida y de las personas , aprende a disfrutar el camino de
escribir un libro, una relación , una empresa, aprende a disfrutar el camino de
construirte mientras ejerces el control con balance sobre ti y tus
circunstancias.
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