Un día conocí a la princesa de
hielo cuando la miré frente al espejo y me miró con lagrimas en los ojos
deseando no volver sentir ¿y que crees? Su deseo se cumplió, ella dejo de
sentir durante mas 1095 días, se convirtió en una deidad sin sentimientos, incapaz
de involucrarse emocionalmente con su entorno bajo ninguna circunstancia o situación,
empezaba a convertirse en la diosa del hielo y el corazón se le había empezado
a congelar en el pecho, pero sabes; también creo que en secreto ella si sentía,
digamos que sentía cosas por los animales, los objetos, la música, sentía cosas
por si misma pero era incapaz de conectar a nivel emocional con absolutamente
nadie.
Entonces ; descubrió un super
poder o al menos eso creía, ella se volvía cada vez más insensible, podía escuchar
a las personas hablar de emociones y sentir interés nulo por dichas personas o
sus temas emocionales, era capaz de romper lazos con singular facilidad,
finalmente estaba disfrutando la maravillosa magia de no sentir y en apariencia
se sentía genial, se sentía bien, era maravilloso no conectar con los humanos.
Ella amaba vivir en su castillo lleno de espejos, animales y música, ella amaba
su espacio personal, ella empezaba a cogerle gusto a no sentir, pero un día mirando
a través de la ventana de su palacio de hielo observó un par de aves posadas
sobre un árbol darse amor y pensó si
acaso la diosa también había perdido esa capacidad, ¿Acaso se había vuelto
completamente inhumana e insensible?, entonces mando traer a uno de los
miembros de su corte, al más guapo y distinguido y con la frialdad propia de la
diosa de hielo, lo beso para ver si aun era capaz de sentir, y que terrible fue
su consternación al notar que en efecto no sintió absolutamente, mientras el la
miraba con ojos embelesados; nuestra diosa de hielo entonces mando traer a otro
miembro de la corte el más inteligente y
lo besó, pero tampoco sintió nada ¿Acaso habría sido posible que ella hubiera podido
perder la capacidad de sentir? , nuestra diosa de hielo, pensó que a lo mejor
si iba con el sabio que habitaba en su jardín obtendría respuestas.
Con total desesperación se
levantó a la mañana siguiente y fue a ver al sabio que meditaba en su jardín -Querido
sabio, vengo para que me ayudes a responder una simple pregunta ¿Por qué no
puedo sentir nada por ningún humano? - preguntó la diosa con total preocupación
, a lo que el sabio respondió -Querida hija, he escuchado que haz convocado a
todos los miembros de la corte buscando algo que sin lugar a dudas nunca se ha
ido y permanece en tu interior, porque recuerda que el corazón quiere lo que el
corazón quiere-. El sabio entonces dejó a la diosa con más preguntas en la boca
y entró nuevamente en trance.
La Diosa regresó a su castillo de
hielo sin comprender la respuesta del sabio, - ¿El corazón quiere lo que el
corazón quiere? – se repitió a si misma la pregunta mientras pensaba en comer,
así que pidió a sus sirvientes que preparen un enorme festín pues como comprenderán
toda esa situación le había dado hambre.
A la mañana siguiente la diosa de
hielo se despertó en su habitación, se estiró en la cama, asomó su cabeza por
el balcón y vio un pájaro amarillo malherido junto a su rosal favorito, corrió
hacia él e inmediatamente lo tomó entre sus manos, el pajarillo parecía no respirar,
entonces ella pidió a sus sirvientes que trajeran todas las cobijas necesarias
para darle calor y volverlo a la vida, ella sentía la imperiosa necesidad de
hacer algo por el pequeño animal y cuando tras muchos esfuerzos este abrió los
ojos algo dentro de su corazón se encendió.
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